Casualidad o no, los dos discos más sobrecogedores (y, para qué negarlo, también los mejores) que un servidor ha escuchado en 2016 se hicieron mirándole a la muerte a los ojos. Nada más comenzar el año Bowie se nos apagaba con “Blackstar”, el espeluznante testamento de un condenado, la turbadora nota de despedida de un […]
